lunes, 1 de diciembre de 2014

Carta de un marinero

"¿Sabes por qué elegí esta playa como nuestro santuario?... Sin duda alguna, decidí que la costa sería nuestro punto de partida. Nuestro destino sería el horizonte, y el mar, bravío y cambiante, nuestro mayor obstáculo. Cuando te miraba, sabía que cada paso que diéramos se convertiría en un logro único e inconmensurable. Veía en tus ojos la mayor de mis travesías, con la mejor compañía y la mejor y más resistente embarcación. No cabe ninguna duda de que tu mirada prometía más que aventuras, y embaucaba a mi alma por encima de mi control. Eras tentadora, más que cualquier tesoro en cualquier mapa perdido.

...

Una playa que siempre me lleva hasta ti. El sonido del mar enmascara bien mi voz en mi mente, porque creo que me avergonzaría con todo lo que te confieso cada vez que vengo... Pero... No se cómo puedo seguir vivo después de... tu accidente.
Algunas veces creo que la vida se equivoca en sus elecciones. Para mi no existe la suerte, ni la casualidad. Para mi... Existe el error y el acierto. Estoy convencido de que el destino cometió un error contigo. Tú deberías estar aquí, deberías ser el timón de mi embarcación, mi vela y tus ojos cada farol que alumbraran el nocturno mar. Tú... Deberías seguir siendo mi futuro.

La vida me ha forzado a venir aquí desde el día en el que te fuiste. No me queda nada que agarrar mas que breves recuerdos. Solo fe... de que puedas saber de mí allá donde quiera que estés. Aunque me quede sin dinero, sin casa, al igual que en su día me quedé sin barco, te prometo, aunque lo haga todas las noches que vengo a verte, que siempre escribiré para ti. Dejaré siempre un mensaje que, espero, la corriente lleve a tus manos. Jamás te olvido, porque aunque tu ausencia me atrape, tu recuerdo sigue siendo luz cuando me siento perdido. Pensar en ti es divisar un faro en una tormenta. Pensar en ti es sufrir, pero también es saber que jamás hubo mejor guía, mejor brújula, ni mejor tesoro... Que tú.

Te extraño pequeña marinera."

Tras preparar la botella con el mensaje y lanzarla... solo le quedó observar y oír con detenimiento el movimiento de las olas a medida que éstas se llevaban su mensaje a un puerto mejor. Estaba convencido de que la vida le compensaría su error al menos con eso: algo de lo que alegrarse en medio de la pura soledad.

domingo, 30 de noviembre de 2014

Pocas palabras

"Ser bueno no me va a quitar el frio en invierno. No va a darme el empujón que necesito, ni va a servir de ánimo cuando me hunda.

Ser bueno me da la ilusión de esperar lo mismo que ofrecí. Me da esperanzas, algo para creer, pero no me da el hecho.

Y así, en pocas palabras, ser bueno vuelve a convertirse en una inversión sin futuro, porque ni siquiera hablo de un provecho a mi antojo. Hablo de mi mismo, perdido en la helada ausencia de motivos.

Hablo de que, cuando muera, el cementerio estará lleno de tumbas repletas de momentos, recuerdos, sueños cumplidos... Y la diferencia conmigo es que mi tumba va a estar vacía de todo: solo yo, yo solo."

viernes, 21 de noviembre de 2014

Solo una pregunta

Hace tiempo probablemente me olvidaras, y bendita tu dócil memoria por dejarte disfrutar de ese placer. Pero aun así solamente quiero... preguntar cómo te va todo. Se que hay pretextos erróneos, así como errores que sirven de pretexto. He aprendido a ser humano, y con ello aceptar que jamás podré ser perfecto, ni para mi ni para nadie. Por eso te puedo preguntar. Por eso solo quiero calmarme un poco.
No soy rencoroso, ni contigo ni conmigo mismo. Puedo perdonarme el ser un capullo, como también puedo perdonarme el haber tenido el valor para tomar decisiones difíciles. Probablemente me mire en el espejo y vea rastros y más rastros de dudas y más dudas. Pero bueno, nada sirve ahora...
Y por ello solamente te pregunto cómo estás. No se si es por ser bueno o por estar viejo y no saber lo que hago. No se si piensas a saber qué de mi. La diversidad de opinión es respetable, y dentro de lo que cabe las connotaciones sentimentales no entran al trapo en este asunto. Me interesa saber si todo te va bien, solamente porque sigo siendo increíble y estúpidamemte bonachón para algunas cosas, eso creo.
Espero que todo te vaya bien, que hayas conseguido ese sueño que perseguías, que puedas esbozar una sonrisa cada día, porque por muchos errores que tengamos, siempre merecemos estar tranquilos y felices.

Aunque pienso yo que si algo no me merezco... es esta estúpida memoria tan buena.

martes, 11 de noviembre de 2014

Escribir sobre nostalgia

Me has pedido que escriba.
De ti, de tu mirada, tal vez de lo mucho que te amaba. Tal vez de un camino, un paraíso en llamas, un sueño lúcido del que no te levantas. Me has pedido que escriba lo que en otras palabras grito cada instante. Me has pedido que me controle, y no se verme a mi mismo y quedar tan distante. Porque existe mucha más distancia entre mis yo, todos ellos, que la que existe entre tu "te" y tu "quiero". Y a la vez todo arde en odio, a la vez todos me abruman cuando parpadeo.

Sin saber que ser yo jamás es ser yo mismo, me has pedido escribir. Pues esto es decepción, es el silencio transcrito en cada segundo de cada minuto en el que deseo volver al punto en el que te conocí y golpearlo para que todo ahora sea distinto. Esto es mí mismo soñando con un futuro mejor y escribiendo los relatos de un destartalado amor de fogonazo.
Me has pedido escribir y es como pedirme que sangre. Es como dejar escapar entre mis dedos la sinceridad del momento, y plasmar, plasmar la muerte escrita sobre un lienzo.

No hay amor que quede vivo en el silencio de este lápiz escribiendo. Tal como lo que siento al mirarte de nuevo, al mirar tus ojos negros. No hay presente, solo un pasillo estrecho hacia un pasado de ensueño. No hay veranos para despreocuparse; ni como el que me sirvió para conocerte, ningún invierno.

viernes, 19 de septiembre de 2014

Pensar en duplicado

Piensas que sí.
Que te sonríe el espejo, y la luz del sol te sienta hasta bien en el rostro. Piensas que todo está realmente hecho, que esta vez has ganado la batalla por paliza, que puede inundarte la tranquilidad. Piensas que has alcanzado el objetivo, que el esfuerzo ha merecido incluso más que la pena. Piensas en sonreír porque estás seguro en las manos de tu logro. Piensas en positivo porque la vida se ha convertido en algo simple que se sostiene solamente con tu bienestar y el de tu ansiada compañía.

Te das cuenta de que no.
No eres quien desearías ser en el momento en el que te compadeces de tu reflejo. Tu mirada describe perdición y tu temblor solo expresa verdadero miedo. La vida que te rodea no te lo ha puesto para nada fácil, y por más que ansías compañía y seguridad en tu interior conoces la naturaleza errática e imperfecta del ser humano. No puedes depender de ella. No debes dejar caer tu peso en sus manos. No puedes confiar en un "para siempre" por mucho que lo sueñes. Ni una ni mil promesas ni palabras bonitas te distraen de la verdadera esencia, que es el creer. No te sirve creer porque no conoces la confianza. Solo conoces el dolor de la pérdida, el abandono, la soledad y la falta de apoyo. Solo conoces el silencio y el grito ahogado. Solo conoces el error y el arrepentimiento. No puedes alzar la vista porque ni siquiera puedes acabar de verte a ti mismo. No puedes pensar en el presente o en el futuro porque el pasado es una cicatriz que aún palpita de dolor.

Y cuando todo se calla a tu alrededor y te toca decidir, piensas...

Piensas que no.

lunes, 1 de septiembre de 2014

Lo normal

Echo de menos escribir sobre amor. Echo de menos la ilusión, el deseo, el color de la pasión. Extraño cada segundo inmerso en un sueño infinito, y volar con cada beso a cualquier lugar pero contigo...
Añoro los viajes por el mar que empieza en tus labios, y persigo mil deseos acabados en un corte agrio. Yo ya no soy más marinero de alma empedernida, sino más bien prisionero de los recuerdos de mi vida.
Andar ya no es lo mismo, caminar y terminar viejo en mi destino: no ser más yo y ser reflejo finito, no ser más amor, "me enfrío, luego existo."
Y hoy aquí me encuentro, borracho melancólico obstinado y de palabra "don perfecto", deseando morir, deseando abandonar este cuerpo...

Echo de menos tanto y tanto tiempo... Extraño vibraciones que hacían de mi vida un cuento. Añoro las palabras que formaban edificios, que me hacían sentir seguro y que ahora son precipicios. Salto por cada una solo para caer en otra, salto para morir y vivo muriendo por volver a vivir...
Que llamen a esto amor, que es sufrir sin consuelo dando cada parte de mi mismo y dejar mi vida por los suelos. Que llamen a esto cariño, cuando hago de tripas corazón, y morir ante ti cada segundo pero al menos te sonrío. Que yo también soy un enamorado aunque sin camino, con deseos y sueños a pesar de que no estén correspondidos. Que tu abandono me rompe siempre en mil pedazos, y ser siempre el estúpido conforme con haberte querido.

Y tras haber llorado cada noche en cada esquina, saber que me vida entera es una ruina... y odiarme a mi mismo.

domingo, 3 de agosto de 2014

Ser o no ser


[...] Verán ustedes... En aproximadamente dos horas es la vigésima vez que me he cuestionado quién soy, o quién debería ser acorde a cómo normalmente me comporto. Para este asunto no existe una guía detallada "para idiotas" - y miren que no estaría nada mal - por lo que mi diálogo conmigo mismo no es que esté perdido, es que directamente no tiene ni pies ni cabeza.

¿Quién soy? Esta maldita pregunta es casi tan inevitable como explotar burbujitas de plástico de embalaje. Digamos que el eco de esta cuestión en la cueva de mi cabeza se traduce en más y más preguntas inferiores. Divide y - tal vez - vencerás. ¿Qué estoy haciendo? ¿Quién quiero ser? ¿Cómo me comporto? ¿Me parezco en algo a los demás? Apuesto a que alguno/a de ustedes de igual manera se ha visto arrinconado/a contra la pared, y en ese instante ha tirado de una solución rápida aunque nada práctica: soy lo que parezco ser.

¿Es esto así? ¿Somos lo que parecemos ser? O tal vez, ¿somos lo que queremos parecer? Mi cuestión vuelve a asaltarme y la lucha parece bastante perdida. Sin embargo, es necesario rascar la superficie del asunto, aunque nos dejemos los dedos en ello. Parece que unir los verbos "ser" y "parecer" no propicia una correcta reproducción del sentido que esperamos extraer para solucionar nuestra duda existencial, aunque en términos gramaticales ambos verbos, ser y parecer, son verbos copulativos - y ya sabemos lo que nos gusta copular -. Si yo fuera tan estricto y tuviera que parecerme a algo para ser, tendría un grave problema.

No escribo por amor. No encuentro palabras agradables en su sonrisa, porque la sonrisa en sí no es palabra. No veo atractiva una canción con afirmaciones obvias sobre lo maravilloso que es ser feliz - que casi siempre se relaciona con estar enamorado -. Me inspira demasiado bien la tristeza. Encuentro un llanto poético, y detesto la compasión barata. No necesito demostrar al público lo feliz que soy cada tres minutos, sino descubrir qué es lo que me hace feliz en cada instante y aprovecharlo. El silencio realmente puede tener ventajas y su atractivo. No voy a morir si alguna vez no tengo a alguien a mi lado. No soy lo que como, ni lo que bebo, ni bebo para ser. Lo que aparento es lo último que soy, por lo que no me obsesiono en aparentar. No soy una máscara ante una mirada perdida, ni un lobo vestido de cordero. Me enorgullece expresar algunas veces sin utilizar palabras, así como saber estar callado cuando se requiere...

...

Puede que algunas veces no sepa quién soy, pero lo que sí sé es que no puedo fijarme en todos y cada uno de los prejuicios, estándares, cánones y modas para intentar saber quién soy. Puedo ser alguien que no me gusta en determinadas ocasiones, alguien rudo e imperfecto, tal vez difícil de entender y de controlar - en el buen sentido -. Puedo ser inestable, frío, distante, y también eufórico e imparable. Puedo ser de mil maneras, ser un "todo en uno" de carne y hueso... Porque lo importante en este asunto es que debo ser, y no parecer.

Manteniendo esta premisa, podemos mirarnos en el espejo, recordar nuestros sueños, pensar en esa sonrisa que nos ha salido involuntariamente en algún momento de muchos - y ya de camino echar unas carcajadas recordándolo -. Podemos hacer memoria de nuestra infancia y nuestra inocencia. Podemos saber qué queremos mejorar de este mundo y cómo queremos que cambie.
Podemos estar seguros de que somos nuestra razón para estar vivos, nuestra propia particularidad, eso que no es igual a lo demás. Somos el cambio que tanta ilusión nos hace ver en el mundo, una proyección hacia el futuro formada por todas las experiencias del pasado. Somos incomparables, inconmensurables e inigualables.

En resumidas cuentas: somos, que no es poco.

Y es que dentro de esta conclusión se dan casos como el mío. Para aprender a ser algo más que un simple "alguien" he tenido que valerme sin otro/a alguien a mi lado. Es mejor la soledad que la compañía no deseada. Es mejor saber estar con uno mismo primero, antes que intentar estar con los demás. Es más sano ser para uno mismo que aparentar para el mundo.

miércoles, 25 de junio de 2014

Corta arremetida

He visto desvanecerse mis suspiros en busca de mil soluciones, y con mi mirada perdida he caído otras mil sobre mis propias rodillas. Por ser puro egoísmo, tus palabras, y cada gesto del que haces una ostentosa gala, y dirigirlo todo hacia mis agrietadas murallas. Porque no te importa, es verdad, a quién le importaría apreciar y respetar la dificultad de tener valentía, valor en cada una de nuestras miradas y nuestra voz.

Caes, como rocas que no se resisten a la gravedad, como barcos de papel en una cascada, en la facilidad de la crítica, la tuya ceguera y de cada una de tus palabras. Y así, golpe a golpe, la vida decae y se estampa en la oscuridad de cara, nos rodea y nos atrapa en la perdición, engañados con poder encontrar un solo mapa. Porque cuando atacas y no paras solo alimentas tu maldición, y se acaba el cariño por poco que haya. Se acaban las sonrisas y empiezan las mentiras de dolor.

Y no es suficiente ironía, no, que es necesario adivinar en ese momento que tu ayuda ni ha servido ni servirá, que cuando hablas ya rompes puentes con cualquiera de mis yo. Y todo se convierte en una lucha por la defensa de mi alma, mente y corazón... Todo entonces se resume en perder.
No existe más ciego que quien no quiere ver.

martes, 17 de junio de 2014

Buenas noches

Buenas noches son deseos,
mi cariño que no es perfecto,
cada segundo que te veo
resumido en este cuento.

Son la ilusión que viviremos,
todo lo que habremos soñado...
Nuestro universo en este verso
y mi existir a tu lado.

Buenas noches son "lo sientos"
y "te quieros" enfrentados.
Como son más que mordiscos lentos,
que se dan soñando y abrazados.

"Buenas noches" te digo con mis manos,
y te pongo cada sueño en tu manto.
"Buenas noches" y te miro estando en velo,
porque por fiarme ni siquiera de Morfeo.

Y luego pienso, inquieto, que te veo
y te deseo sobre cualquiera de los precios...
Suspiro "buenas noches de nuevo"
y te cubro hasta quedarme sin labios
de besos y más besos.

sábado, 14 de junio de 2014

Dualidad

Algunas veces un abrazo... y otras un disparo.

Así me veo, tan dispar, tan atrapado y tan raro. Porque no son suficientes una ni dos, que mi error subyacente se reproduce amargamente y me conduce al dolor y a la desesperación.

Palabras ya no sirven, ni el cariño ni el amor. Ni el castigo por las buenas, ni sonreir a la vida, ni poner la otra mejilla...
Que me observen por la calle borracho de nostalgia y me señalen con el dedo por ser el falto de confianza.

Porque lo he odiado y he luchado contra él, lo quise cambiar pero soy yo quien se ve diferente. Soy el futuro incierto, un manojo de caminos... soy aquel estúpido niño que creyó poder vencer al destino.

No hago mas que repetirme palabras de consuelo, no hago mas que arrepentirme cada vez que me miro en el espejo. No hago mas que combatirme en esta guerra fría, soldado y prisionero ambos carentes de sentimientos.

miércoles, 11 de junio de 2014

Juicio de propósitos.

- ¿Crees que servirá? Es inestable e impredecible.

- Lo es, pero contiene dolor. Y el dolor es la fuente de su poder, y de nuestro control. Podemos darle un propósito, podemos crear un futuro para su odio. Podemos extraer su fuerza y orientarla contra lo que se oponga a nosotros. Porque él, muy profundo en su interior, está perdido...
Solo míralo. Su mirada apenas se sostiene firme, su cuerpo no conoce posición confortable. Su mente le atormenta y se hunde en su agonía. Nosotros vamos a darle un objetivo. Vamos a enseñarle a concentrar su poder, y vamos a ponerle delante todo lo que le ha destrozado... para que él mismo descubra quién es.

- ¿Y si se niega? ¿Y si prefiere dejar de odiar? Está perdido, pero yo lo he conocido muy bien en el pasado, y jamás se habría pensado que él llegaría a tal punto de violencia y maldad. Ha recibido muchísimo odio, ha sentido el dolor de la pérdida, ha padecido el abandono y la soledad y ha sido fiel compañero del olvido. Sé que es nuestro hombre, pero no estoy seguro de si responderá como requiere la compañía. Si tanto dolor le ha causado el pasado, ¿de qué sirve a una persona noble devolverlo sin razón, motivo o excusa aparente?

- No quieras imaginar lo que el futuro nos depara si su poder no nace en su odio para emerger de su nobleza. La profecía tiene dos caminos que se separan en este mismo momento, y al final de cada camino las víctimas son muy distintas. La compañía espera los mejores resultados por parte de nosotros, y si fallamos...

- Lo se. Déjame hablar con él.

Las puertas de la celda se abrieron y con paso firme el agente de adentró en la estancia. El prisionero lo miró, realmente asombrado:

- No puedo creer que de todo el mundo tengas que estar tú aquí. He perdido a muchísimas personas... pero tú eras el último que esperaba que se marchase.

- No me he marchado. Quiero ayudarte, es decir, queremos ayudarte. La compañía quiere devolverte tu vida con garantías. Volverás a tu antigua vida, y tendrás todas las posibilidades y medios posibles para tomar venganza de todas esas personas que alguna vez te han herido y robado un pedazo de ti.

- No debería estar encerrado aquí para aceptar o no una oferta de vida. Además, ¿acaso sirve de algo? Esas personas me han herido, muy muy profundamente, pero... ¿no es eso lo que las personas hacen? ¿Acaso somos perfectos? Asumí el daño que me hicieron porque acepto los riesgos de ser una persona humana. Yo también soy un ser humano. Sufro y me derrumbo, para después levantarme. No quiero venganza, ni castigos. No quiero propuestas llenas de más dolor, ni esta moral a medio construir que me pones en bandeja. No sabes nada del lado que has elegido en esta batalla...

- Pero... tú eres el elegido por la profecía. Tu poder... cambiará el mundo y decidirá nuestro futuro. La compañía sabe eso, y quiere ayudarte a controlarlo.

- ... Antes de que te des cuenta estarás encerrado en esta celda con tu compañera, la que nos observa tras el cristal. La compañía no va a apropiarse de mi poder aprovechando mi dolor. La respuesta no es venganza, la respuesta es ejemplo. Ejemplo de cómo deberían ser las cosas para que el dolor que sufro no se reproduzca y se propague. Ejemplo para no convertirme en lo que tanto deseo erradicar. Tu, la compañía... No comprendéis lo que significa la palabra "amor" en este mundo, y la profunda necesidad de que esa sea nuestra gasolina y la del planeta... Se acabó. Se acabaron vuestros planes. Si me dejé atrapar es para tener esta última conversación, y justificar todo lo que voy a hacer a continuación...

martes, 10 de junio de 2014

La peor situación: tormenta.

Solamente un trueno rompía con el silencio sepulcral de su pequeño hogar, su trozo de realidad. Tal y como las gotas de agua golpeaban sin cesar el tejado de barro cocido, sus pensamientos lo atornillaban en su mente, curiosamente también construida de barro... Porque realmente hablamos de un chico muy moldeable, siempre tentado con la felicidad, con la paz y la calma de haber hecho las cosas bien. Hablamos de alguien deseoso de ser buena persona, pero ingenuo e iluso: alguien para quien el mundo no está preparado.

De nuevo, otro trueno removía hasta los cimientos de su alma, y el estruendo irrumpía groseramente en su discutir consigo mismo. Aquellas palabras, tan cortas y tan presentes... tan simples y tan subjetivas... pero tan ciertas y reales lo agitaban de un lado a otro de su mente, y su diálogo ya no era controlado, su pensamiento había salido de todas las maneras posibles. Su mente se había vuelto salvaje.

"¿Es cierto que soy así de frío?" Pensaba inquieto, temiendo lo peor. Tragaba saliva con dificultad mientras habría una pequeña caja que guardaba bajo su cama:

"Aquí están... Tantos recuerdos de tantas historias, de personas que una vez estuvieron y que... parece que por mi culpa... han desaparecido. Por mi culpa, por no haber hecho las cosas bien... porque no basta con desearlo, y yo no he sido lo suficiente para ninguna de estas personas. Y ahora, ¿en qué me he convertido? Ahora soy un demonio. Ahora hago daño, soy frio, aparto a todos de mi lado y acabo con toda esperanza... No tengo razones ni motivos. No tengo fe ni metas, ni ilusión. No más, porque solo tengo dolor y arrepentimiento. Y este sería pues mi destino. Yo, mi mente, y una tormenta a mi alrededor.
... Tenían razón. Soy frío, serio y distante. Soy algo que no vale nada y con quien ni merece la pena hablar. No tendré nunca más en mi vida esa motivación que una vez me caracterizó. Porque he perdido demasiado de mí mismo, y he perdido a demasiadas personas."

Al cerrar la caja derramó una gota de llanto sobre ella. En silencio, siempre en silencio, siempre arrepentido de en lo que se había convertido, siempre aislado y convencido de no merecer ayuda, de no ser útil ni para él ni para nadie.
Finalmente ató sus pies y su mano izquierda a la cama para no sufrir daños en sus sueños. Lo bueno de la lluvia es que era el sonido más familiar y seguro que tenia, ideal para intentar dormir.

jueves, 5 de junio de 2014

Cercano a pensar...

Era el noveno espejo que colocaba en su baño, y mirándose pensó:

"No más llorar, no más recuerdos. No más pensar en palabras, palabras, palabras, no se las lleva ya el viento. Pesan, pesan, forradas de hierro oxidado. Han soportado mucho, mucho, mi llanto, me veo desconsolado. Me veo derribado, derrumbado, y odio, odio, este revivir de mi pasado. No más, no más, palabras que se repiten, o palabras que no hallo. No más no soporto no vivo no respiro solo expiro cada instante cada segundo se me escapan los motivos para volver a quererte ni a ti que te miro...
No puedo seguir... no puedo aguantar más... voy a morir aunque siga vivo... Solamente deseo que pare, que pare por favor. Que pare de pensar, que odio pensar, odio recordar y... recordar cómo yo... ¡JODER ODIO RECORDAR,  PARA DE UNA JODIDA VEZ! "

Su puño quebrantó el espejo mientras su desesperada mirada se clavaba en el desorganizado reflejo. La respiración acelerada resonaba en toda la estancia. Y se miraba, roto, tal y como se encontraba: en mil pedazos.
La sangre recorría las grietas en el espejo roto, separando cada pequeño reflejo con líneas rojas. Era la imagen de su odio... su odio hacia cada aspecto de su ser...

Recogió en su trastero otro espejo. Era el décimo en ser colocado en su baño....

sábado, 31 de mayo de 2014

Investigación

"Cuán iluso fui. Por un instante vital estuve convencido de que mi propósito era ser feliz. Qué estúpido pensamiento, y bastante contradictorio en mi juicio porque no es posible mezclar ambos caminos.

Tenemos la opción de vivir una vida de felicidad, o vivir una vida de propósito. El que vive para ser feliz hace caso omiso al pasado y al futuro. Su mente y su alma están ancladas al presente tan férreamente que no puede ver más allá de cada segundo que vive... Y tampoco lo desea.
Sin embargo, el que vive por un propósito tiene una perspectiva bien distinta. Vive revolcado permanentemente en su pasado y obsesionado con el futuro. Planea, mide, calcula y estima diariamente su funcionamiento, sus elecciones y las reacciones de su propia vida. El propósito implica preocupación, inquietud y una inseguridad al menos minúscula... El propósito elimina la felicidad.

Y yo, trágicamente, abandoné la sensatez para creer ciegamente que podía mezclar ambos caminos. Como resultado, mi vida entera ha sido sufrimiento, desesperación, llanto, una decepción y un fracaso constante...
Sin embargo he podido aprender la lección más importante de esta mísera vida: el único propósito que, al alcanzarlo, hace que toda la vida signifique nada a su lado.
Espero que Dios me perdone por dejar que descubráis mi propósito de esta manera."

El detective dobló la carta que encontró en la gabardina del cadáver y guardó sus manos en sus bolsillos para protegerlas del frio nocturno.

- La vida de quienes se sienten malditos... No saben cuando cierran los ojos si mueren o si ya están muertos con anterioridad. Porque mueren cada día un poco más en su interior, donde no encuentran esperanza ni consuelo para sus fracasos... donde nunca hay luz y siempre diluvia.

- Por desgracia siempre llegamos tarde, oficial. Nuestra causa puede ser fuerte, pero tenemos los mismos fallos que ellos, y por eso se hacen indetectables ante nosotros.

- Por cada uno de ellos rezaré para que sean acogidos y bañados de felicidad allá donde vayan. A nosotros solo nos queda recoger sus ya vacíos restos mortales. Y si ese es nuestro propósito o no. .. que sea como tenga que ser. 

jueves, 29 de mayo de 2014

El idioma de la pérdida

"No hay nada que comprenda mejor que el idioma de la pérdida. A fin de cuentas, muchos lo dominamos sin saberlo. Muchos sabemos llorar, sabemos decir adiós y mostrar nuestra compasión a quienes pierden en ese preciso momento. Es el idioma universal. Es el sentimiento general que no necesita ni presentación ni modales.

Desde que empecé a crecer me di cuenta de que nunca había tiempo para decir hola, y sí para decir adiós. Nunca había tiempo para detenernos y simplemente disfrutar del presente. Desgraciadamente, mi vida siempre me empujaba y me empujaba. Nunca disfruté lo que tuve ni disfruté de lo que se preocupaba en tenerme feliz. En este momento... conocí el idioma de la pérdida por primera vez.

Aprendí a estar callado, a esquivar miradas y palabras. Aprendí a llorar y que solamente pudiera escucharlo yo. Y mientras tanto, una sonrisa permanente me servía de barrera para el resto de perdidos. Porque eso es lo que eramos... perdidos. Aprendí a ser duro, sobretodo conmigo mismo, y no aceptar errores. Mi idioma solo debía ser comprendido por mi... y la perdición por todos.

Aprendí a estar perdido. A ser un río sin desembocadura, a ser sin razón ni objetivo. Aprendí a no depender, a no estimar, a no tener cariño y a ser frio. Aprendí que es mejor desaprender la humanidad y desprender de mi todo resto de cadenas. Aprendí aún mejor el uso de la mentira y la farsa. Y logré un nivel de aislamiento y soledad que ya nada ni nadie puede romper.

Porque si algo está claro ya hoy en día como chico perdido... es que perderme en alguna perdida ya sería mi perdición definitiva."

miércoles, 28 de mayo de 2014

Terrores

Empieza con tu llanto,
termina con el mío.
Acaba con los besos,
la voz,
deseos y el cariño.
Dobla el esfuerzo
y lo doblega,
lo hace cautivo
sin pedir nunca perdón.

Me venda con un velo
ausente de compasión.
Asumo lo que es bello:
la belleza del dolor.
Me pierdo y espero
en mis sueños rellenar
mi hueco estando vivo.
Me tendió una trampa a maldad:
el amor de ensueño, el destino.

Hoy ya no grito
"estoy solo".
Hoy es silencio
que ya me tiene roto.
Hoy es cansancio seco:
porque ni siquiera lloro.
Hoy somos tú y yo...
...no más nosotros.

martes, 27 de mayo de 2014

Conversaciones.

- Necesito comprender cómo puedes llegar a este extremo. No hablas, no ríes, no escuchas... Ni siquiera duermes, y tus ojos parecen caerse a trozos. ¿Por qué no puedes llevar una vida normal? ¿Por qué siempre andas metido en algún lío, con algún problema, inquietudes o razones para preocuparte? No te entiendo, no te puedo comprender. No me cabe en la cabeza sabiendo todo lo que te hemos intentado ayudar... Porque te queremos y queremos que lleves una vida estable sin tanto sufrimiento... Por favor, mírame cuando te hablo, porque ni eso puedes hacer por lo que veo.

- No intentes arreglar mi fachada para un mundo de ciegos. No procures que hable para sordos. No pretendas ser si la realidad se llama soledad. No quieras saber lo que más tarde se convierte en una carga. ¿Ves lo que tienes delante? Tienes a alguien que se siente solo. Y esta soledad no se arregla con una compañía muy bien pintada. Esta soledad no se espanta durante un rato en una fiesta, ni yendo al cine ni jugando a los bolos. Esta soledad no engaña, porque esta sabe golpear donde más duele. No sirve de nada que grites, no te quiere oír. No te quiere ver. Esta soledad nació casi conmigo, y en mi primer llanto se convirtió en sello maldito.
No hablo porque me absorbe la voz.
No río porque se llevó mi optimismo.
No duermo porque me quitó mi paz.
No llevo una vida normal porque mis ojos saben ver la auténtica y cruel realidad: nunca ha habido nada.
Si quieres un consejo: haz caso a tu mente como han hecho todos, y olvida lo que no puedes solucionar con métodos superficiales... tarde o temprano el olvido será mi merecido hogar.

Él le dio la espalda a ella al terminar de hablar. Sólo quería dejar de molestarla y que como mínimo ella pudiera seguir con su vida. Al menos así él podría ser un poco más feliz. Odiaba sus maneras tan bordes... Pero su tono siempre ocultaba a ese chico pequeño temeroso que necesitaba ayuda.

martes, 20 de mayo de 2014

Palabras en la guerra

Mi ángel:

La guerra me ha convertido en un monstruo. Me alisté pensando que lucharía por algo justo, y, aunque siga pensando eso, no puedo justificar ni uno solo de mis actos como soldado. En el campo de batalla nadie es mejor que nadie. No hay buenos ni tampoco malos. Todos somos asesinos, asesinos con permiso para abrir fuego. Y mi amor, no puedo describir el horror de ver a personas muriendo constantemente a mi alrededor, ni el olor de la guerra, ni el sufrimiento de cada grito ni la desesperación de quienes, malheridos, se arrastran a buscar el escondite más próximo.

Mi fusil ha devorado el alma de dios sabe cuántos... y todas ahora pesan sobre mi conciencia. No imaginaba que esto sería tan desolador...
Hoy sabemos que no nos quedan muchos recursos, y que las tropas contra las que nos enfrentamos se acercan a paso muy ligero.

Mi cielo... Se que nunca más volveré a verte. Y si lo hiciera por alguna remota casualidad o milagro, nunca podría perdonarme semejante acto de maldad por haber matado a hombres que tenían también una familia. Asi que esta es mi última carta, y te pido que nuestro hijo nunca sepa que su padre ha sido un asesino. Que sepa que la guerra es el peor invento que el ser humano ha ingeniado en su historia, y que desde donde yo pueda estar en el más allá protegeré vuestras vidas con toda mi existencia.
Se me parte el corazón al pensar en el futuro que os quedará con mi muerte en estos días venideros, pero ni todo el amor ni toda la voluntad del mundo me sacará de la crudeza de esta guerra.
Nunca he dejado de pensar en ti, nunca he cesado en rezar todo lo que conozco ante tu foto. Has sido siempre lo que me ha impulsado para tener una esperanza en el día de mañana, y siempre será así mi corazón.

No encuentro más palabra que el silencio entre disparos en esta pequeña tregua invernal. Y no tengo más remedio que despedirme con lágrimas en los ojos, y un temblor que difícilmente puedo controlar. Cuida del pequeño para que el día de mañana sea un ejemplo a seguir. Y vaya donde vaya, nunca me olvidaré de ti.

Te amo, mi ángel.

viernes, 16 de mayo de 2014

La cárcel de la verdad

Golpeó suavemente la pared, aprovechando el oportuno silencio que se produjo en el resto de celdas. Estaba tan fría como el ambiente, repleta de rasguños y arañazos, y hacía juego con el aire cargado de culpabilidad y lamentos:

- ¿Estás ahí?

Tras un silencio que se hizo eterno, esa voz sonó de nuevo:

- Claro que estoy aquí... ¿dónde crees que voy a ir?

- El silencio estaba matándome, y prefiero que lo haga la silla eléctrica antes que la soledad.

- La soledad es nuestra más fiel compañera, y el silencio es el mejor aliado para estar concentrado en nosotros mismos. Aproveché mi última voluntad para que el guarda de la puerta este me prestara un cuadernillo y un lápiz ... ¿Sabes? Necesitaba escribir. Escribir acerca de la libertad y la verdad... Porque a pesar de estar preso aquí, sigo creyendo que existe ese paraíso, ese objetivo que siempre he andado buscando. 

El silencio invadió la estancia durante un breve espacio de tiempo.

- Por favor, no te calles, háblame, sigue hablando.

- Nunca asesiné a esas chicas, ¿te lo puedes creer?... Ellos me metieron aquí por desprecio, pero en el fondo sé que la razón alcanza el nivel de terror. Me tienen miedo. Nos tienen miedo, y no somos distintos de vosotros, blancos. Nosotros tendremos el color de piel distinto, pero nuestros corazones son del mismo color que los vuestros. Y esa sarta de mentiras, de prejuicios y de ignorancia nos han perseguido, uno a uno, hasta asesinarnos por ninguna razón. Esta cárcel es la fiel representación de la mentira como arma de destrucción masiva, y el corredor de la muerte no es más que el único camino cierto que nos lleva a la liberación eterna. ¿Quieren matarnos? Acabad con nosotros, acabad conmigo, matadme, porque así podré salir de aquí, de este mundo de mentiras donde cada persona cree lo que más le conviene.

Podía oírse el recorrido del lápiz acariciando las hojas de aquel cuadernillo desde casi todas las celdas, y el eco de su voz retumbaba en cada esquina.

- Creo en la libertad, y creo en la verdad, aunque ambas no se encuentren en este mundo. He sido testigo de miles de mentiras antes de acabar aquí, y he visto con mis propios ojos personas que viven engañadas por una libertad muy bien pintada. No sois libres. No sois libres en un mundo donde todo es terror, donde os protegéis aunque ni siquiera sepáis de qué. No hay libertad donde existe la duda. Y la verdad... ¿dónde estará la verdad? Aquí y allá, cualquiera puede hablar, cualquiera puede decir algo. Por mucho que hoy nos duela reconocerlo, si por cada persona hay una manera de ver el mundo, de verte a ti, a mi, a nosotros, ¿dónde crees poder encontrar la verdad? 
Hoy escribo en honor a la verdad y a la libertad, porque el día de mañana habré muerto. Y espero que mi pequeño legado perdure durante mucho tiempo. La verdad y la libertad están solamente en nuestros corazones. La libertad y la verdad forman parte de lo que nuestro corazón nos hace seguir para ser felices.Y solo separándonos de nuestros terrores infundados podremos ser felices. ¿Eso es posible en este mundo? Puedes apostar que no, por eso quiero morir aquí. Quiero morir, y quiero olvidar todo lo que me ha hecho casi imposible ser feliz. Quiero olvidar a ese maestro que me miraba como si fuera un niño sin futuro ni razón para vivir. Quiero olvidar a ese juez que me separó de mi familia. Quiero olvidar ese amor que acabó mintiéndose a sí misma, que se dejó llevar por el terror y que me hundió en la última miseria. Jamás estando vivo olvidaré el día en el que todos y cada uno de ellos decidieron dejar de creerme para creer en la mentira.

- ... Yo aún tengo mi última voluntad, y tu compañía ha sido lo más importante que he tenido este tiempo atrás. Y por redimirme de esta culpabilidad quiero llevar tu verdad a quien más desees. Escribe, y yo me encargaré de que llegue a su destino, como si se tratara de tus últimas palabras.

Pasaron los fatídicos días hasta la primera ejecución, y el acusado dejó caer una nota frente a la celda contigua:

" He intentado escribir, de veras, pero nada organizado ha sido capaz de salir de mi mente atormentada. Por eso quiero que hagas llegar esto a la única persona que me ha importado y que aún creo que queda viva...

Querida:

Cuando muera, moriré en silencio, porque mis últimas palabras son las que lees en este trozo de papel. Mi pequeña verdad, tan cierta para mi como falsa para ti, y para otros. No creo que eches de menos nada de mi, pero yo echaré de menos esos minutos en los que pude sentirme en paz en un mundo lleno de falsas apariencias. Y cuando me borren de este planeta, llevarme conmigo solo una breve sonrisa tuya, reflejo de tu corazón, la única verdad que siempre quise defender en ti. Me iré lamentando muy tristemente el día que me diste la espalda, porque pasaste de ser el único pilar de mi vida a ser el ancla que me hundió en las profundidades de la tristeza. Espero que en tu vida no vuelvas a ignorar lo que tu corazón te dice, porque esa siempre será la única verdad. No hagas caso a nada más que no sea sus latidos."

Un nombre adjunto y una dirección, la mancha de una lágrima yace en una esquina, y un deseo que se llevaría a cabo.

martes, 13 de mayo de 2014

¿Qué es?

"¿Qué es amor?" me pregunta sin cesar mi mente, y yo sin poder excusar mi mala suerte mientras mi corazón se me desprende.

"¿Qué es amor?" me pregunto yo. Retumba y resuena el estruendo del dolor. Porque amor es confianza y traición. Es lluvia que cala y sol, que me abrasa. Amor nació para ser eterno, y hoy vive como condición, como viajero del viento.

Y de nuevo me pregunto, sin más de respuesta que perdición y vacío, que me congela postrado ante sus puertas.

Que Amor ahora es una maldición que corre por mis venas. Como cubrir una herida con hiedra, como tapiar mi corazón con mosaicos de piedra. Amor es una lucha por ser iguales entre rivales que no pueden dar la espalda a la guerra. Amor es la muerte por y para de la parte más débil, el final de una batalla, la conclusión perfecta.

Una nueva fe y esperanza no ha sido. Ni luz para mi sendero, ni la mano que me sacaría del fuego. Amor ahora es un juego de mentiras que para uno de los dos resulta divertido.

"¿Qué es amor?" ... y contesto a la pregunta: amor no somos, ni tú ni yo.

viernes, 9 de mayo de 2014

Nunca perder...

Recuerdo aquella vez que vimos a escondidas esa película que nunca olvidaré. Recuerdo sentir la inocencia que desprendías de "chica linda" y cómo así, y solo así, conseguías ser una verdadera figura de belleza en mi mundo.
Casi eramos dos niños en un mundo de fantasía debajo de aquellas sábanas a modo de tienda campaña. Nuestro fuerte, nuestro castillo, aquel lugar que nadie podía invadir... tú y yo. Jamás voy a poder contener las lágrimas, porque llevo cada recuerdo tatuado en el alma, y tu voz aun ronda en mi cabeza como la banda sonora de mi vida.

Como así tampoco contengo una sincera sonrisa que brota desde mi interior, aun estando desolado. Y entre suspiros siguen escondidas mil preguntas que siempre me hacía acerca de ti. No podía explicarme cómo podías ser tan inteligente y tan astuta. A pesar de nuestra edad, sabias perfectamente cómo hacer que estuviese bien. Conocías mi chocolatina favorita, mis dibujos animados, esa canción que jamás salía de mi cabeza e incluso ese superhéroe que yo quería ser de mayor.

No es para menos que a día de hoy me siga quitando el sombrero cuando te recuerdo. Porque sigues siendo ese misterio sin resolver, ese respiro perfecto en un mundo repleto de prisas y nervios, ansiedad y desesperación...
Y, aunque ya no estés y tenga poquísimo tiempo por el trabajo... sigo montando esa tienda de campaña con aquella película... sigo viéndola una vez tras otra, rememorando tu presencia, recordando un momento de felicidad que jamás quiero perder.

Será el día que me toque marchar cuando pediré que nadie llore porque yo también viviré para siempre en aquella película. Y, al reunirme contigo, podré finalmente estar seguro de que nada ni nadie me separará de ti, al menos, hasta que descubra qué es lo que siempre te hizo tan perfecta.

domingo, 4 de mayo de 2014

Será

Será porque te quiero, y mi querer es odio, impulso y desenfreno en el momento. Será que algunas veces me arrepiento de mi ira, y otras es que gana el que te ganes saber sobre mis sentimientos...

Será porque te odio, y mi odio es querer. Querer atención y respeto, querer ser justo en gritos y en besos, y ser el más alto de tus modelos, ser ejemplo, aunque de todo menos perfecto.

Será que soy lo más parecido a un amor sin serlo. Que mis ganas de ser querido me hagan estar ciego, o realmente no estar preparado para alcanzar el amor y tenerlo....

Será que es mi culpa, será ser un perdido eterno... Será estar confuso y no encontrar rastro de mi sendero.

Y es que como ser podría ser todo lo que imaginemos... Que yo mientras esté ocupado no pienso, no lloro, no inquieto, no inseguro... Y aunque a rasgos generales no viva... en realidad tampoco muero

jueves, 24 de abril de 2014

Cosas por decir...

Conocemos perfectamente lo importante que llega a ser una persona cuando tenemos tiempo para pensar en ella a solas. Solo cuando no está, cuando se ha ido, sea por la razón que sea, es cuando notamos su ausencia y su vacío.
Maldita esencia egoísta humana, que hace insaciable nuestro deseo de ahuyentar la soledad con la mas bella presencia que encontremos en la vida. Maldito corazón, que en un intento por latir estruja cada pensamiento en el que está esa persona para sacar hasta la última gota de combustible.
Y a pesar de encontrarnos solos, desamparados y cabizbajos... amamos sin límite ni condiciones. Amamos sobre nosotros mismos, por la felicidad de ser puros, por admirar aunque sea una vez más la suave sonrisa que dibujan esos labios... Porque no somos más que polvo si no es amor el que nos da forma... El sentido de seguir erguidos, de vivir, de cada lágrima y cada sonrisa, de cada tristeza y cada alegría.
Puede que siempre nos arrepintamos de algo que se quede en nuestro interior. Que cada día puede ser el último... Y al menos yo suelto este amor sin control, libre para que la busque. Y, si mañana muero, estaré en la siguiente vida aguardando la llegada de su alma.

Entonces esa persona se manifestó diciéndome: No temas pues aunque no este presente siempre  habitaras en mí. No ansíes extrañar lo que necesidad no haya, no anheles a quien tienes si no lo que pierdes. 

La esperanza  y perseverancia te trajo mi compañía… Ahora tú descarta la soledad, agarra mi mano y no te sueltes, te ofrezco las alas que te llevaran lejos. Y de nuevo se esfumó quedando así la vitalidad de sus palabras… Palabras que atrajeron mi fortaleza, para seguir amando sin necesidad de consuelo alguno, abriendo camino entre las sombras... Proponiéndome lograr afrontar un sin fin de sentimientos y emociones para no seguir lamentándome, para vivir el presente sin imaginar un futuro. 

Y si de verdad muero…Si llego a morir…Quedará su imagen, sus palabras, toda aquella felicidad que recibí al escuchar de sus labios un te quiero haciendo así la espera mas llevadera en la eternidad, hasta que volvamos a encontrarnos de nuev

miércoles, 23 de abril de 2014

Haz tu sueño realidad

Sé que me ves desde ahí arriba y no tienes nada que temer. No es el vacío infinito, ni final escarpado en el que morir. No es muerte la que te espera en el camino, no es fin sino empezar a vivir. Sé cuánto lo deseas, sobretodo deseo de conocer la sensación, de experimentar la caída, de saborear la emoción con cada poro de tu piel.

Adelante, por favor. Si realmente confías en mi... salta. Salta sin temor, sin que tiemblen tus miedos. Salta porque te espero, aquí en este lago de agua cristalina bañado por la luz lunar. Porque hoy aguardo tu llegada a mis brazos, entre lágrimas de alegría, viendo mis tristezas salir despavoridas de mi sonrisa.

Salta, porque te amo.

lunes, 21 de abril de 2014

Polos

Se odiaban. Se gritaban. Cada roce era una guerra y cada silencio una batalla...

Pero la unica verdad era que sabían lo que querían.
Se deseaban por encima de todo. Por encima de llantos y orgullo...

sábado, 19 de abril de 2014

Cuestión de ángeles.

Cómo tienen que ser tus palabras que con ellas puedes acariciar mi alma... Cómo de este arrepentimiento tu voz me calma y la luz de tu mirada me salva. ¿Cómo, ángel de la guarda...?

Cómo tenerme arrodillado y arrepentido de pecados, y tus manos me levantan, calmado me hayan y mi sonrisa libera por fin sus alas. He respirado vida tras haber sido derrotado, he alzado un vuelo que jamás habría imaginado.

No merezco más que el despecho y el desprecio, el olvido más desgarrado... Pero tú apareces para ser mi motivo, mi viento en el océano, mi isla paraíso para este náufrago fugitivo.
Eres nada de lo que arrepentirse y todo por lo que estar orgulloso... Que aunque me hundan las lágrimas, entre sollozos hayo mi sonrisa y mi alegría de la vida: ser yo, ser para ti... ser nosotros.

lunes, 7 de abril de 2014

Gritar en silencio

Él ya perdió la cuenta de cuántas veces quiso alejarla de sí mismo. Aterrado por su propia oscuridad, y testigo día a día de que la misma abrazaba con malicia todo aquello que él alcanzaba con cariño. Estaba cansado, mentalmente, y deambulaba sin rumbo entre pequeñas razones para al menos mantener algún tablón de su barco a flote...
No sabía qué hacer para no hacerle daño a ella. No sabía cómo actuar para que ella estuviera realmente protegida. Ella seguía tras todos esos muros, gritando, llamando, ofreciendo una mano, una ayuda, una salida... pero él no podía acceder por terror, por miedo, inseguridad y desconocimiento. Sin embargo, nunca se detuvieron las llamadas ni los reclamos... ella jamás se rindió.
A nadie desearía él el estar observándola, tan bella y ejemplar, tan brillante como la luz al final del sufrimiento, desde una cárcel de dolor, recuerdos destruidos y esperanzas hechas añicos.

"¿Cómo puedes no rendirte? ¿Cómo sigues ahí si he intentado alejarte de mi? No quiero dañarte, no quiero que sufras. No quiero que te hieras, y que algo de mi oscuridad te hunda. No quiero ser responsable ni de una lágrima tuya, ni de que tus sonrisas desaparezcan, y que entre sufrimientos se fundan...

Porque te veo también aquí, y yo desde donde tú estás. Porque me llamas desde tu prisión, entre lágrimas y sonrisas, alegrías y tristezas... Porque quiero salvarte, ganarme tu felicidad, y no quiero tocarte por terror a ser un error fatal...

Sabes, te admiro. Admiro tu sinceridad, así como tu voluntad de acero y esa fuerza que siempre sabes sacar. Me superas, me haces quedar atrás, porque no soy más que un preso de tu propia libertad, ansío sin parar y me hallo deseoso de alcanzar contigo más allá de este cariño, eliminar este hastío entre yo y mí mismo..."

La quería, por encima de cualquier muro, por haberle demostrado que un corazón puede seguir siendo puro por mucho sufrimiento acumulado. Por enseñarle que siempre queda la esperanza...
Y aún, entre fosos de oscuridad y barrotes de cristal, ambos siguen gritándose entre ellos, buscándose el uno al otro, para eliminar tantas diferencias, para llegar ambos... al mismo objetivo

miércoles, 26 de marzo de 2014

Amar en contradicción.

"Se me ocurren miles, miles de motivos, para marcharme de tu lado de una vez por todas. Se me ocurren porque es que no vivo, no siento todo lo que me has prometido, no soy yo sino otro más de tu lista de queridos y cariños vividos...
Y ya es que no quiero querer. Sólo quiero ser feliz y sonreír. Yo no se de qué manera, pero quiero salir adelante y pasar una página de mi vida que comenzó bien y se tornó oscura y fría. Necesito hoy esa libertad más que nunca, necesito saltar al vacío por la tranquilidad de la caída, aunque finalmente nadie me venga a salvar. Pero todo eso me da igual.

Me da igual por mi sonrisa, antaño poderosa y siento que aún tiene mucho que dar. Por mi voluntad y mis ganas de ser fuerte. Por mis ganas de vivir y mi amor por mi mismo... Y es que esta vez tú no serás esa chica que se vuelve a salir con la suya... Esta vez..."

Paró de escribir y suspiró. Miró fijamente al papel y no pudo contener las lágrimas. Entonces pensó.

*Te odio. Te odio y no te amo como el primer día. Porque me tienes atado con mis miedos. Porque tienes a mi cuerpo y mente jodidamente acostumbrados a que seas la especial, y no saben ver a otra. Este es tu callejón sin salida, y ahora yo no se salir. Me detesto porque tengo a gente que me quiere más que tu amor de residuo, gente para la que soy un chico que vale la pena, y yo como un idiota hundido en un amor de mentira. Me miento a mismo para mentirte a ti. Porque la sonrisa con la que arreglas todo solo me calma para volver a engañarme, no para curar mi corazón... No puedo marcharme de tu lado porque me tienes controlado, obligado a creer en un amor que no merezco*

Y agarró la nota para colocarla en un baúl escondido, con mil notas más, también para coger polvo en el olvido.

martes, 25 de marzo de 2014

Nada...

Nada. Qué nada. Que mi vida es mía, tan rota, tan desesperada. Tan unida a un camino que se me escapa, y conscientemente perdida es pérdida definitiva... que se mata... que me mata.

Que es nada de lo que había, y nada de lo que aun está por venir. Nada de lo que pienso que hay, nada para pensar, ni sentir, ni besar para vivir. Nada tan vacía y pobre, ausente y silenciosa.

Nada, anfitriona de llantos, culpable de tantos y tantos errores tontos que me siguen tentando. Maldita que odio... pero es nada... Es yo, mi vida y solo mía, reflejo de lo que brilló, un fuego que ya se apaga, un amor que murió entregándolo todo.

Tan fuerte que escribo palabras que gritan y no dicen nada. Palabras de hierro, pero que siempre sangran.

miércoles, 12 de marzo de 2014

Una noche más.

¿Hoy? Hoy es soledad mi amiga,
que me agarra y me desangra,
hasta la muerte me traslada,
maquillando todo con caricias.

E irónicamente su oscuridad
me deslumbra.
En mi fría mente la ironía de vivir
cavando mi tumba.

¿Dónde fueron mis palabras?
Dónde para no volver a sentirlas,
dónde para no encontrarlas,
que por mi espalda me apuñalarían.

Porque soy yo quien sufre, muere
y lo escucha.
Porque soy yo quien deja al amor
que me destruya.

Hoy soledad tampoco recoge mis lágrimas,
tampoco me da ánimos, ni me calma.
Y lloro gritando el silencio de mi alma vacía.
Lloro, por no saber que mi yo se cerraría.

He perdido más que mi destino:
perdí en este frío sinsentido,
el corazón marchito de uno mismo.

martes, 4 de marzo de 2014

Respuesta.

- Francamente - continuó con su respuesta el profesor - estoy aburrido de esta vida de pinturas. Porque me cansa ver imágenes cuando quiero de corazón ver personas, y maldito el cansancio que me produce una sociedad realmente ciega que se obsesiona enfermizamente con fachadas. [...] A mi me gusta sentir. Me gusta pensar y expresar lo que pienso. Adoro escuchar y compartir opiniones, gustos, palabras y gestos. Me gusta ser yo y me encanta que cualquiera lo sepa, porque esta es mi única verdad permanente: pese a todo lo que cambie en mi vida, yo seguiré siendo yo. Sigo siendo con el paso de los años el viejo "rarito" pero, para ser sinceros, me sigue encantando como el primer día en el que me titularon así. Porque si de otro aspecto esta sociedad de cloaca puede estar orgullosa, es de esa innata capacidad para juzgar prematuramente y criticar, eso sí, sólo en el sentido más estrictamente negativo del término. Para veteranos como yo este tema la verdad es que ni nos va ni nos viene. Sin embargo, pienso yo trágicamente en aquella multitud de casos de personas con esa autonomía y ese amor personal aún por desarrollar. Carne de cañón para las influencias sociales de la moda, lo "correctamente rebelde", las normas axiomáticas y demás etiquetas destinadas a la más pobre segregación. Gracias a mi ya malherido destino tengo la suerte de ser profesor, y a todos vosotros os puedo al menos hablar claro: si algo os va a identificar el día de mañana en esa gris marea de almas perdidas es vuestro corazón.

El profesor sacó de su bolsillo una cartera de cuero, y de ella una pequeña fotografía de lo que parecía ser él mismo de pequeño.

- Lo que daría yo por haber aprovechado aquellas ocasiones dignas de actuar con el corazón, y a las que, temeroso, di la espalda con el uso de mi inexperta razón. [...] Nunca dejéis que la corriente os dicte qué sentir, pequeños corazones puros. Vosotros sois el futuro que demostrará de nuevo al mundo que las fachadas se rompen con tantas mentiras colgadas. Vosotros sabréis enseñar que el corazón es lo más importante, ya sea para vivir en el planeta Tierra, o para sobrevivir en el mundo humano.

domingo, 2 de marzo de 2014

En un mundo no tan lejano...

Ella no sabe que él la tiene en mente. Ella no sabe todo lo que él la recuerda. Ella no se da cuenta de que él está siempre preocupado por ella. Ella no sabe que cada noche da un paseo agridulce en la mente de él. Ella no sabe que él la ve en cada rincón de su vida y su imaginación. Ella no sabe que él escribe pensando en ella. Ella no sabe todas las lágrimas que él ha derramado a escondidas. Ella no sabe todos los deseos que él guarda a pesar del dolor. Ella no sabe que él rememora cada recuerdo para saber lo que era ser feliz. Ella no percibe que es lo más importante para él. Ella no ve la mirada que él aún le sigue lanzando. Ella no ve que él oculta su dolor para pintarlo todo bonito. Ella no sabe todas las cicatrices que él se ha tenido que curar. Ella no sabe lo que él tiene que esforzarse para volver a sonreír. Ella no sabe que él sigue mirando sus fotografías. Ella no sabe que él sueña muchísimo con ella. Ella no sabe que él solo desea volver a ser feliz haciéndola feliz. Ella no sabe que él la ha amado, ha muerto mil veces, y sigue luchando por mantener vivo un amor puro.

Ella no sabe nada porque lo más fácil en esta vida es alabar la ignorancia.

martes, 18 de febrero de 2014

Pequeño testamento

- Escribe en mi lápida este epitafio, que por mucho correr jamás he evitado que me alcance. Así al menos habré aprendido, aunque sea tarde. Así al menos habré aprendido, aunque no vaya a servirme.
Y me voy, me voy al infinito con esta norma en la frente, para compartir y ser compartido, para por fin ser querido y, por qué no, querer.
Para no volver, y que mi vista no tenga más donde caer muerta que hacia el frente, hacia el llegar a ser. Y no negarle a mi ya corta vida el juramento de alcanzar algún sueño, de esos del más allá de nuestro cuerpo, de los sentidos y los besos prohibidos con peligro.
Llegaré a vivir justo cuando ya esté muerto, y a sentir desprendiéndose mi alma de todo esto, tan bellamente imperfecto...

... Escribe en mi lápida que una promesa real y verdadera es aquella que jamás se promete, y vive. Vive sabiendo que el silencio esconde más que mensajes y la mirada más que detalles...

viernes, 14 de febrero de 2014

" La mar, el mar "

Por fin, colocó el último ladrillo de su obra. Alzó su vista y observó su propia creación, emocionado y cargado de ilusión.
Tanto tiempo buscando su estructura, su forma y la arquitectura más adecuada dio al fin sus frutos: su fantasía estaba finalizada.

Vaya sonrisa, vaya mirada. Vaya vida que se alegraba de sus logros, vaya pasitos que se convirtieron en largas zancadas. Su talento hecho oro, ya fuera en prosa o en verso, de medida alejandrina o repartido en cuartetos. Ya fueron viva imagen de su más pura esperanza, fuerza imparable, un guiño que se clavaba en el destino como una lanza. Su mejor escudo y también mejor arma...

Vaya felicidad, arquitecto de palabras.

Y en este mundo de silencios se construyen monumentos líricos y poéticos que con su luz son faros para marineros inexpertos. Para que la mar no los lleve al mar... Para no acabar con un corazón muerto y amargos besos...

Para no terminar dejando de ser arquitectos y destruyendo sus obras por ese amor que quiso y no pudo ser perfecto.

lunes, 10 de febrero de 2014

Dulzura

Dulce. Dulce es la brisa y respirar. La libertad de ser preso de dulzura, la pura verdad de una vida arrebatada en aparente cordura.

Dulce es el amor que viene y va. Que pinta de rojo acuarela y lluvia, disueltos en dulces deseos, espuma de un mar sin dueño.

Dulce es la mirada por ser escudo de la sinceridad. Porque el silencio acompaña entre versos, versos de mirar puro y perfecto.

Pues casi todo en la vida es dulce. Todo, menos los besos que no se dan, menos el amor que ama la guerra y el recelo. Todo, menos una traición con forma de puñal, y vivir mentiras detrás de velos.
Y es que la dulzura deja paso a la amargura con tanta facilidad. Y es que la amargura es del llanto su hogar.

¿Y qué somos sino gotas de esta incesante lluvia? ¿Qué valemos si no damos nada a valorar?

...

He aprendido tarde a valorar lo único que se me ha dado de regalo...

... Solo la que se vive con respeto por la belleza, atención a cada sonrisa, sin detenerse y con profunda locura...

... Solo esa es la eterna vida de dulzura.

viernes, 7 de febrero de 2014

Amores que matan

Adelante.

Destrózame a sonrisas que luego se perderán.
Utiliza cada promesa para atarme contra la pared más y más.
Dame susurros que luego se convertirán en suaves arañazos.
Dame alegrías que me acerquen a yacer decepcionado.

Convierte mi vida en tu mundo al menos hasta que dejes de estar aburrida.
Haz de mi rutina una bella progresión de atención hacia ti misma.
Enséñame esa libertad tan ansiada estando encarcelado.
Clava en mí tu santa mirada, el perfecto engaño de un corazón helado.

Adelante, estoy enamorado.

jueves, 6 de febrero de 2014

Odio y serenidad

Extravagante serenidad la mía, que lejos de ser pausada en repetidos silencios te grita esta misiva...

Me enamoraste en un portal de rosas y te perdí en la primera esquina. Y te busco, te busco, en cada rincón y cada cornisa.

Por si muero sin decir que te quiero... y no quiero esperar otra vida. Por si mi amor desaparece de todo esto, y se convierten en eternidades estos días.

Y es que vivo maldito en un sueño del que cada noche despierto, y muero por ser objeto y desecho de tu dichosa criba...

Odio ser esto y tus "te amo" sin versos, odio ver mis versos envenenados y ver solo tus deseos...

Odio sentir odio porque el odio se odia a si mismo, me hace odiarme y odiarte por todo lo que has destrozado mi destino.

Y si ahora tienes la decencia de mirarme arraigado a este oscuro sino, quiero que sepas lo que siento:

" No es viento lo que se te cruza sino mi voluntad huyendo. No fue tu mágico amor que me hizo estar vivo, sino tus caprichos, que me hicieron en cuerpo y alma cautivo. "

miércoles, 5 de febrero de 2014

Eterna carrera

Lo tenía todo preparado: la ropa en su bolsa, la montura bien atada y su fiel corcel a punto y bien alimentado.
Miró al sol y dejó escapar una leve sonrisa,  mientras acomodaba su sombrero con rapidez. Era el momento adecuado.

Ser armó no sólo de sus pertenencias sino de su más profundo valor, y susurró a su compañero equino que todo iba a salir bien y con el jinete a punto salieron al viaje.
Él soñaba con el sol, con ese calor y su majestuosidad. Vivía para perseguirlo y acabar su vida tan alto como su caluroso mentor. Amaba el fuego y la pasión, y su amor era loco y desquiciado como él mismo.

Su caballo galopaba a más no poder, haciendo polvo el camino y con una energía que bien no podía salir casi del mundo real. Jinete y corcel enlazados por el mismo deseo, la misma fuerza... Y nunca se rindieron.
El sol ante ellos corría y corría, siempre hacia el horizonte, tanto y tan veloz que la carrera se les hacía más y más difícil. El jinete gritaba para alcanzar más velocidad porque el sol se les escapaba.

Mágicamente el sol parecía no huir más, el galope era excesivo, el mundo casi desvanecido, la voluntad los alimentaba y no había nada que pudiera con ella... nada... hasta ese fatídico momento.

Silencio, impotencia perpleja... Cansancio y sobretodo angustia... El océano se extendía ante ellos. El jinete agachó la mirada, y bajó de su montura para arrodillarse en la orilla.

"Viejo amigo... Lo hemos intentado lo mejor que hemos podido... Dándolo todo, y parecía que lo teníamos ya con nosotros,  ¿eh?"

Y solo el silencio acompañó al sol, que finalmente se escapó, perdiéndose en el horizonte...

lunes, 3 de febrero de 2014

Vodka

¿Su mejor amigo? El vodka.

Lo sacudía con esmero y admiraba en aquel vaso la profundidad de su vida. Su alma, tan blues como aquella guitarra que sonaba desde el pequeño escenario, y su brillo... ausente, como el sentido, la gente, el aire y el sonido de ambiente en su corazón sumido.

Estaba harto, mientras pedía otro trago.

"Malditas palabras que ni salen, que huyen despavoridas y cobardes, tan rápido y lejos como ella misma. Tan alejado queda todo, y tan cortos mis brazos, tan impotente y tan desesperado. Tan cansado... que este es el fin... dame otro trago"

Y más fuerte golpeó el vaso en el mostrador de madera.

"¿Por qué? Si amo el sonido, si soy súbdito de su idioma sin palabras, si siento cuando oigo y subo al cielo... ¿Por qué, de todos los ángeles, el lobo disfrazado eres tú?... ¿Por qué, de todas las musas en música, me elige el blues?"

Y en aquel oscuro rincón de la baja ciudad pudo quedarse por horas y horas, días... Y tal vez semanas. Porque, ¿a dónde ir cuando el único hogar que se construye acaba destruido? Quedó tan vacío que solo el alcohol pudo llenarlo...

Vagabundo de amor, esclavo del alcohol. Olvidó tanto que también olvidó la vida.

¿Su mejor amigo? El vodka. El único que lo acompañó hasta la muerte.

viernes, 31 de enero de 2014

Carta de deseos

Alcanzó la cima de aquella colina en la que tanto pensaba una vez entrada la noche. Sus pasos, ajetreados y acelerados, rompían con el suave silencio de la naturaleza, y le otorgaban a la misma un pequeño toque de nervios y estrés. Estaba llegando a su cita.

Al toparse con el punto más elevado sonrió. Estaba allí, la estaba viendo, la estaba percibiendo y estaba junto a ella. Se sentó haciendo un pequeño hueco en la hierba con las manos y miró sonriente hacia todo aquello con lo que había soñado y que tanto había deseado.

Ya no importaba el frío, el extremo silencio que reinaba, alguna que otra nube en el cielo o que ni siquiera era luna llena. No importaba el bullicio ni los problemas, que se hacían minúsculos con su presencia en aquel pequeño rincón de la naturaleza... y de su vida.

Todo lo que existía se redujo a observarla y sentirla. Sacó una pequeña libreta, y con el pulso inquieto comenzó a inmortalizar el momento con palabras:

"No se si sabes quien soy, pero yo sí te conozco. Eres esa con la que tanto he soñado. Eres paz cuando todo es ardiente de ira y está cargado de problemas. Eres calma en cualquier tormenta de mi vida y placer cuando el sufrimiento reina. Eres casi mi amor perfecto, mi eterna victoria y recompensa. Motivo de mi locura más que reconocida tanto por mi como por los que me rodean. Porque nadie sabe cómo eres, nadie sabe lo que me haces sentir y lo que significas...
Envidio tu libertad, así como tu habilidad para desaparecer tan rápido como apareces. Eres esquiva y escurridiza, huyes cuando te sientes amenazada... pero esta vez quiero que te quedes conmigo. Quédate y haz de mi vida un lugar más tranquilo. Enséñame a ser como tú. Enséñame a ser libre y cargado de energía, que nada me pare y que me quieran como yo a ti...

Brisa, enséñame a ser brisa."

Cuando acabó, arrancó la hoja y respiró hondo. Cerró los ojos, y dejó que la hoja cayera de sus dedos al viento... Para que aquella brisa se la llevara. Al abrir los ojos, la hoja había desaparecido. Sin destinatario ni destino fijo...

... Una carta a la brisa. Una carta al viento.

viernes, 10 de enero de 2014

El diario.

"Desperté entre sábanas blancas y te admiré... hasta la primera luz de tu mirada.

Porque no hay nada más hermoso, no, que ser presa encarcelada de los sellos que me besas...

Y tus manos, que me llevan, me trasladan a una felicidad única y me dejan embobado por tu voz, que para mi es pura música...

Es que aún no lo comprendo y jamas creo que entendería, que siempre soñé con este amor de ensueño y yo solo soy un secundario a tu lado, protagonista de esta fantasía.

Y donde antes solo cultivaba silencio ahora mi felicidad grita de alegría... Con poco hilo casi roto pudiste coserme una verdadera sonrisa."

...

Ya no pudo contener una pequeña lágrima por su mejilla, aunque esta vez no quiso tampoco... esta vez no era de tristeza. Cerró aquel pequeño diario lleno de polvo y mil rasguños, y lo agarró con fuerza. Sus páginas albergaban su vida, y su corazón descrito con palabras. La noche era muy tranquila y el silencio no le resultaba incómodo esta vez...
Se secó la cara justo a tiempo, porque la puerta se abrió y ella entró en la habitación:

- Te he traído una infusión roja, igual que la mía. Es mi favorita, espero que te guste, aunque ya se que no eres mucho de beber infusiones.

Su sonrisa aderezó aquella bebida a la que tan poco estaba acostumbrado, y mientras bebía pudo cerrar el cajón suavemente con la cintura, guardando aquel diario en secreto. Él observó aquellos ojos mirándolo fijamente, y casi que olvidó el sabor de la infusión. Ella lo era todo para él. Entonces intentó hablarle:

- Sabes... Se que soy muy pesado... Y de veras lo siento por repetirlo tanto, pero yo te...

Ella le cerró la boca poniendo un dedo delante de sus labios:

- Ya lo se tonto. Me lo dices muchísimas veces al día. Se que eres inseguro y piensas que el día de mañana puedes perderlo todo, pero yo estoy aquí contigo. No tengas miedo y no te preocupes...

Él la miró y le respondió:

- En realidad no es por eso por lo que te lo digo. Yo escribo, mi don es el uso de la palabra. Se que es molesto que esté todo el día diciéndotelo, pero si me quitas la posibilidad de decírtelo, me quitas la mejor manera que tengo de expresarte lo que siento por ti. También tengo miedo, pero tu mirada me salva siempre.

Ella no pudo evitar sonreír, y él la miró a los ojos:

- Te amo...

Aun habiendo escuchado esas palabras muchísimas veces, ella sintió que fueron de nuevo las primeras. Ambos tomaron infusión casi en silencio, porque desde hace años podían hablar con la mirada...

- Eres idiota, pero un idiota muy adorable... No volverá a pasar un año más estando separados. Fuiste el primero, y también serás el último.

No necesitaron hablar más. Tenían miradas, infusión y besos. ¿Qué más necesitarían?

jueves, 9 de enero de 2014

Tic tac tic tac

Lo he perdido mil veces y cada vez que despierto sigo sintiendo que lo tengo. Aún estoy tras de sí y a veces lo veo muy detrás mía, cuando quiero perderlo de vista. Algunas otras quiero congelarlo y no dejar que me arrebate cada detalle que da sentido a todo esto, mi vida. No he cesado en mi deseo de comprenderlo, porque hay momentos en los que me mira y no veo compasión, justo cuando él mismo me da todo lo que ansío de todo corazón.
Estoy cansado de esto. Estoy cansado de esta barrera que me impide controlarlo...

Pero tengo que seguir luchando...

Hoy me tumbo en mi cama y es de esas noches en las que lo noto tras mis talones. Me acecha porque conoce mi punto débil, sabe que tengo algo que perder. Sabe que ella es mi punto débil. Y se disfrazará de miedos, de excusas y traumas que me traerán llanto y lamentos. Porque es como un niño que lo quiere todo, y no puedo permitirlo.

Dicen que todo héroe siempre tiene un punto débil. El mejor de los buenos en las películas siempre tiene algo que perder. Es la responsabilidad que asumimos cuando el sentido de nuestra vida pasa a tener nombre y apellidos. Y realmente ahí se encuentra la emoción. Yo necesito amarla, defenderla y sacrificar mi vida por ella, porque mi destino es entregarme en cuerpo y alma a ella. Necesito que este villano quiera arrebatarmela, porque así le demuestro que mi vida tiene valor, que mi destino es un tesoro, como su amor, y que este villano jamás tendrá semejante premio.
Sólo puedo ganar si arriesgo algo que perder. Sólo puedo ser fuerte si conozco mis debilidades.

Y durante mi vida este malvado me ha quitado mucho que yo tenía. Y donde creyó haber dejado polvo y tristeza en realidad dejó aprendizaje. Por eso hoy estoy tranquilo: aprendí que esta lucha no puedo hacerla solo, que necesito a esa otra persona preparada como yo... y que esa persona ya está conmigo.

Lo siento querido enemigo, tú no serás mío, porque ya no lo necesito.